jueves, 23 de octubre de 2014

EL ESTANQUE DE LA BARABACANA: MISTERIO Y RITOS CELTAS

ESTANQUE DE LA BARBACANA


Ubicado en el corazón de la Rioja Alavesa, en lo alto de un cerro, destacando como un navío navegando entre mares de viñedos, se localiza la deliciosa localidad de Laguardia. Durante la Edad Media la Villa estuvo vinculada al Reino de Navarra, de donde deriva su nombre, conocida entonces como “La Guarda de Navarra” por su ubicación estratégica frente al Reino de Castilla. 

LAGUARDIA ENTRE VIÑEDOS

Pero su historia va más allá, hunde sus raíces en lo más profundo de los tiempos antiguos, cuando allá por el siglo XV antes de Cristo, gentes venidas del centro de Europa crean un asentamiento en el valle, actualmente conocido como poblado de La Hoya. 

POBLADO DE LA HOYA Y CERRO DE LAGUARDIA


A lo largo de los siglos, el establecimiento fue evolucionando, hasta que sus moradores decidieron trasladarse al cercano cerro y fundar un nuevo poblado en lo que actualmente es la villa de Laguardia. Viejas historias, muy viejas se esconden entre los mil tonos otoñales, ocres, rojizos, de los viñedos que rodean la localidad, algunas probablemente no llegaremos jamás a descifrar, quizás en eso estribe su poder de atracción y de fascinación.

AMANECE EN LOS VIÑEDOS

El imponente perfil pétreo de la Sierra de Cantabria protege la localidad de los vientos del  norte, y precisamente de las frías tierras del norte, llegaron a estas latitudes influencias de una cultura antigua y mágica, cargada de leyendas y brumas, que atrapa irremediablemente a quien se acerca a sus misterios, es la cultura celta. Son varios los vestigios celtiberos que podemos disfrutar, sin prisa, en la Rioja Alavesa, entre ellos se sitúa el hermoso estanque de La Barbacana.

PARTE DEL ESTANQUE


Este depósito artificial ubicado en el interior de la muralla medieval, en la parte sur, se descubrió en 1998, durante una intervención arqueológica. Su historia se remonta a los tiempos en que los pobladores de La hoya decidieron cambiar la ubicación de su poblado y se trasladaron a lo alto del cerro para así obtener una mayor capacidad defensiva.
DETALLE DE LOS MUROS

Se construye entonces un estanque aprovechando el manantial que fluye en la parte alta de la colina, para ello se valen de una capa de rocas del subsuelo sobre la que se levantan muros de mampostería. El resultado es un estanque con capacidad para almacenar 300.000 litros de agua en sus 218 m2 de superficie.
Pero en el estanque de La Barbacana no sólo se guardan muchos litros de agua, entre sus muros de piedra se celebraban ritos ancestrales vinculados con las matres celtas, deidades femeninas procedentes del noroeste europeo. 

ESTANQUE

Su culto está muy extendido por el mundo céltico, directamente relacionado con los ritos a la madre tierra, a buen seguro su origen es mucho anterior, conectándonos directamente con épocas primitivas del Auriñaciense y Magdaleniense, pertenecientes al Paleolítico superior, es decir, el tercer y último periodo en que se divide el Paleolítico. 

RECREACION DE UN CULTO CELTA

De esta forma nos tenemos que remontar mentalmente unos 40.000 años para encontrar las manifestaciones más remotas del culto a la madre tierra en estas épocas antes citadas. Un misterioso hilo conductor nos acerca en el tiempo hasta nuestro estanque celta, y encontrar los ritos que en él se realizaban a las Matres. Junto a La barbacana se ha localizado un pequeño ara votiva que nos confirma la vinculación del lugar con las diosa celtas y los ritos a ellas dirigidos. Se trata de la conocida como Matribus Useis, cuyo origen parece romano pero de clara raigambre celta. 

MATRIBUS USEIS

Contemplando la pequeña ara de piedra arenisca, dejándonos embaucar por sus tonalidades rojizas propias de las piedras de la zona, intentamos desvelar su ancestral misterio, el porqué de su ser, quizás celosa de su pasado quiera mantener su misterio sólo para ella, o tal vez, nos cuente el porqué hace muchos siglos alguien decidió tallarla y grabar la misteriosa inscripción que podemos apreciar en una de sus caras, dañada por el desconchado

MATRIBUS
FESTIS POM(eia)
[PR]IMITIVA


La Barbacana es en definitiva un lugar cargado de enigmas, que aunque, si bien en muchas ocasiones pasa desapercibido, nos invita a zambullirnos en su arcaico misterio, bucear en siglos de historia, tocar con los dedos parte de nuestro más viejo y remoto pasado.